En 1982, el seleccionado argentino viajó a España para participar en el Mundial 1982, mientras que Argentina luchaba en la Guerra de las Malvinas con el Reino Unido después de la recuperación de las Islas Malvinas, ordenada por el presidente de facto, Leopoldo Galtieri, el 2 de abril. El equipo llegó a España como un gran favorito para ganar la Copa.